Ha sido una semana muy dura. El viernes alguien muy cercano decidió dar su último paso. Nadie lo esperaba. La congoja de enfrentarte cara a cara al dolor más crudo y animal que he visto nunca, el de unos padres que pierden a su hijo, aún nos tiene asfixiado el corazón. Vivimos en una sociedad en la que el suicidio es un tema muy tabú aún, en algunas ocasiones parece vergonzoso, como si la familia cargara con la culpa de esa muerte. No somos nadie para juzgar, por muy incomprensible que nos resulte en algunos casos, los motivos de cada persona.
«Mueren los días y cada patada parece más dulce que cada palabra, mientras las letras se cargan de piedras, el mundo no tiene piedad y da miedo»
Pero la sensación de pena se respira en cada conversación, en cada foto, anécdota o recuerdo. En cada momento que piensas que se va a perder, en que no tuvo curiosidad por saber que le depararía en la vida.
Y no puedes evitar pensar en todas las cosas buenas, esas pequeñas, esas que hacen que los peores días tengan sus rayitos de luz. Esa taza de té caliente en tus manos frías tras llegar en invierno de la calle. Que te tapen con una mantita al dormirte en el sofá con un beso de buenas noches. Ese abrazo en el regazo de tu madre. El recuerdo del tacto de las manos grandes y ásperas de tu padre. Una conversación divertida con tus hermanos. Esos mensajes de tus amigos sin sentido. Pisar las hojas de otoño. Meterte en algún charco. Esa canción. Hacer planes. Cumplirlos o no. Jugar al robot. Que te chupen la nariz. Otro cuadradito de chocolate. Buscar sus pies entre las sábanas. Sentirte agotada pero que te hagan sonreír al final del día.
Gente por conocer, lugares por visitar, esas ventanas que se abren cuando alguna puerta se cierra. Pedir ayuda. Reconocer que no puedes con lo que te está mandando la vida, sea mucho o poco, para ti es un mundo. Salir del hoyo. Huír de la oscuridad. Atrapar en el aire esa mano tendida.
Don´t give up.
Porque hay todas esas cosas buenas, y más.
«Los paseos por el parque, la alegría de bailar, el café y el chocolate, la calma que da el hogar, los amigos y las cenas, las cosas que pasarán, todas esas cosas buenas sí están, todas esas cosas buenas sí están, si están…» Iván Ferreiro
6 Comentarios
Cuánto lo siento! Mucho ánimo y fuerza. Un abrazo linda
Mucho ánimo familia. Por desgracia se lo que sentís y siempre será dificil pero esas primeras semanas son uff…
Cosas buenas: pasear con la cámara a cuestas, un mensaje de whatsapp con una foto divertida, encontrarte con alguien por casualidad, reir y llorar con los amigos.
Muack!!
y el achuchón que nos vamos a dar el domingo! muaaaaaaaaac
Tremendo. No hay palabras que puedan expresar lo que sientes cuando oyes este tipo de noticias. Y en el momento en que eres madre y esto le pasa a otros padres, ya ni hay palabras ni crees que hagan falta en el fondo. Terrible experiencia. La verdad es que a mí es algo que me da pánico porque hay quienes dicen que es algo que puede ir en los genes y ser hereditario. Prefiero no pensarlo 🙁 Mucho muchísimo ánimo para vosotros y para la familia.
Qué bonito y que triste a la vez… Mucho ánimo, es un momento muy duro, y un tema muy difícil de tratar… Si la muerte en general es escabrosa, el suicidio ya es un tema complicadísimo… :*
Muchísimo, gracias guapa.